Salterio 3° Semana. Tomo I Adviento/3°
Miércoles 12 Diciembre
Santos Israel ph, Simón Phan pf tnr.
Ntra. Sra. de Guadalupe (México: solemnidad)
Papa Francisco: La historia de México no puede entenderse sin los valores cristianos que sustentan el espíritu de su pueblo. No es ajena a esto Santa María de Guadalupe, Patrona de toda América, que en más de una oportunidad, con ternura de Madre, ha contribuido a la reconciliación y a la liberación integral del pueblo mexicano, no con la espada y a la fuerza, sino con el amor y la fe. Ya desde el principio, la "Madre del verdaderísimo Dios por quien se vive" pidió a san Juan Diego que le construyera "una Casita" en la que pudiera acoger maternalmente tanto a los que "están cerca" como a los que "están lejos". Allí encuentran la fuerza de Dios para sobrellevar los sufrimientos de la vida. Como a san Juan Diego, María les da la gracia de su consuelo maternal y les dice al oído: "No se turbe tu corazón ¿No estoy yo aquí, que soy tu Madre?'
PALABRA:
Jesús llegó al templo mientras enseñaba, se le acercaron los sumos
sacerdotes y los ancianos del pueblo para preguntarle: «¿Con qué autoridad haces esto? ¿Quién te ha dado semejante autoridad?». Jesús les replicó: «Os voy a hacer yo también una pregunta; si me la contestáis, os diré yo también con qué autoridad hago esto. El bautismo de Juan ¿de dónde venía, del cielo o de los hombres?». Ellos se pusieron a deliberar: «Si decimos "del cielo", nos dirá: "¿Por qué no le habéis creído?". Si le decimos "de los hombres", tememos a la gente; porque todos tienen a Juan por profeta».Y respondieron a Jesús: «No sabemos». Él, por su parte, les dijo: «Pues tampoco yo os digo con qué autoridad hago esto».
ORACIÓN:
Números 24,2-7.15.17a; Salmo 24,4-9 • MATEO 21,23-27
JESÚS, hoy te pido de modo especial por tantos hermanos de México y de toda América Latina que celebran su fiesta patronal en torno a la Virgen de Guadalupe, tu primera embajadora en la evangelización del continente católico. Que la fe que arraigó en sus corazones al amparo de tu Madre jamás se aparte de la vida de nuestros hermanos. Como tú, también ellos se ven atacados por quienes no aceptan tu Evangelio. Yo prefiero acoger tu doctrina con la sencillez del que cree sin discutir y acoge sin vacilar: como san Juan Diego, que lo escuchó de labios de tu Madre. ¡Que todos los hijos de América Latina, que tienen por Madre a María, acojan a la Virgen y la imiten, escuchando tu Palabra, guardándola en su corazón y poniéndola en práctica! (Sigue tu oración personal).