jueves, 8 de noviembre de 2018

CULTÍVATE CON LA PALABRA QUE ES VIDA DEL JUEVES DÍA 08/11/2018





Tiempo Ordinario/32°Salterio 4° Semana. Tomo IV
Jueves 08 Noviembre









Santos Godofredo ob, Adeodato pp.
Beatos Juan Duns Escoto ph, Isabel de la Trinidad vg


Papa Francisco: "Siervo inútil. . .. Alguno de nosotros le aconsejaría a este siervo que fuera a un sindicato a buscar consejo, para ver qué hace con un amo así. Pero Jesús dice: No, el servicio es total. Él es el siervo, el que ha venido a servir y no a ser servido: así lo dice, claramente. Un cristiano que no lleva adelante este don del Bautismo por el camino del servicio, se convierte en un cristiano sin fuerza, sin fecundidad, un cristiano para sí mismo, para servirse a sí mismo. Su vida es una vida triste.

La pereza nos aleja del servicio, y nos lleva a la comodidad, al egoísmo. Hay muchos cristianos así... son buenos, van a Misa, pero el servicio hasta aquí... Cuando digo servicio, digo todo: servicio a Dios en la adoración, en la oración, en las alabanzas; servicio al prójimo, cuando debo hacerlo; servicio hasta el final.




PALABRA:  
Dijo el Señor: «Suponed que un criado vuestro trabaja como labrador o como pastor; cuando vuelve del campo, ¿quién de vosotros le dice: "Enseguida, ven y ponte a la mesa"? ¿No le diréis: "Prepárame de cenar, cíñete y sírveme mientras como y bebo, y después comerás y beberás tú"? ¿Tenéis que estar agradecidos al criado porque ha hecho lo mandado? Lo mismo vosotros: Cuando hayáis hecho todo lo mandado, decid: "Somos unos pobres siervos, hemos hecho lo que teníamos que hacer"»

ORACIÓN: 
Tito 2,1-8.11-14; Salmo 36,3-4.18.23.27.29 • LUCAS 17,7-10
SEÑOR, me mandas que te diga unas palabras que requieren, para ser sinceras, buenas dosis de mansedumbre y de humildad, que yo no tengo. Quieres que te diga, después de haber hecho perfectamente todo el programa que me has trazado para mi jornada: Soy un pobre siervo tuyo, he hecho lo que tenía que hacer. Tener conciencia de haber hecho lo que te complace reporta una gran satisfacción, y cierta autovaloración que está muy lejos de la humildad necesaria para confesarme "un pobre siervo". Y otras tantas veces, no he hecho lo que debía, te he sido infiel y desobediente ¡Ten misericordia! de este pobre siervo, cuando está orgulloso de hacer algo bueno -sabiendo que todo lo bueno me viene de ti- y cuando sin ti no puedo hacer nada! Quiero ser misericordioso con los demás, como tú lo eres conmigo. (Sigue tu oración personal).



















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